Marcha por la calidad de la educación

Los padres de familia encabezados por Javier Villanueva Madrid partieron desde el zoológico Payo Obispo hacia el edificio de la Secretaría de Educación de Quintana Roo, mientras iban aglutinándose en el estacionamiento un automóvil Tsuru gris con placas UVS-5206 buscó refugio al lado de la patrulla de Seguridad Pública. Al querer entrevistar a los pasajeros del automóvil inmdiatamente subieron el cristal de la ventanilla y se cubrieron el rostro para evitar ser fotografiados, los padres de familia que se encontraban presentes comentaron que se podría tratar de maestros que estaban monitoreando quienes eran los que estaban presentes. En total el grupo constituido por 200 personas sin contabilizar a los menores de edad que habían acudido en compañía de sus padres iniciaron la marcha mientras manifestaban en voz alta la necesidad de que los maestros cumplieran con su compromiso con la educación. Nadie duda que internacionalmente el nivel educativo de México está en uno de los más bajos niveles, sin embargo ahora tenemos la oportunidad palpable de entender porque ocurre esto, ya que los maestros están más preocupados por su bienestar que con la vocación. Discursos repetidos millares de veces donde señalan que la educación es la base para el desarrollo económico de nuestro país quedan ridiculizados cada vez que un mexicano cruza la frontera norte para conseguir trabajo, vemos azorados que no es necesaria tanta preparación para ir a un entorno competitivo donde nuestra mano de obra es la que realmente produce la riqueza de esa nación. En peor situación queda la educación pública cuando comparamos el nivel educativo de un niño egresado de una escuela particular que lee y escribe con fluidez mientra otro proveniente de una escuela pública, apenas balbucea las palabras y escribe pésimamente. No está en las mejores salariales para seguir empobreciendo a nuestra nación sino en reclutar individuos comprometidos con su profesión, basta ya de dar privilegios inmerecidos a parásitos que merman la riqueza de nuestro país, maestros que acuden a la escuela a desayunar mientras muchos de los alumnos apenas llenan su estómago con unas galletas y una tasa de café y acuden a la escuela persiguiendo el espejismo de la educación. Maestros que están agazapados esperando la oportunidad de comercializar sus plazas al mejor postor, maestros que heredan sus plazas como si fueran un bien patrimonial, todo esto es consecuencia de un sistema corrupto que envileció y pervirtió a la sociedad que ahora para nuestro asombro, cree que es "normal y parte de los derechos" de los agremiados al gremio de la educación. Desde principios de los 90's se modificaron los estatutos que les permitió la libertad de elegir al candidato de su preferencia y eso los llevó a la creación de un partido político que aún está en proceso de crecimiento, ahora también se les exige que permitan el paso a la competencia en la calidad para poder ocupar las plazas de los maestros de las nuevas generaciones. Debido a la escasa preparación que poseen muchos integrantes del magisterio no se han percatado que el sustento de la economía nacional, que es el petróleo, está a punto de agotarse. Aprovechan con todo el cinismo el incremento de la violencia para chantajear a los padres de familia y la sociedad en general para que sean cumplidos sus caprichos que no van acordes con la realidad.



La Secretaría de Educación de Quintana Roo es dirigida por Cora Amalia Castilla Madrid que fue cuidadosamente seleccionada para ocupar el cargo, ya que es de todos conocidos su incompetencia administrativa y también está más ocupada por continuar enriqueciéndose para sostener la belleza espuria de su rostro mientras la sociedad se derrumba. En el vídeo que podrá escuchar muestra su preocuapación por "las tantas necesidades" qe existen en la educación y en lugar de ofrecer una solución a los padres de familia que demandan su intervención se desvía hablando de la infraestructura y las escuelas y mejoras que tendrán proximamente. Refinada en el arte de la distracción no pudo ofrecer una respuesta satisfactoria a los padres de familia. Esperemos que algún día harta de su permanente belleza plástica haga lo mismo que un día hizo Dorian Gray y decida subir al desván para clavar varias veces el puñal al retrato al óleo que envejece día a día mientras su alma envilece cada vez que cuenta peso por peso sus cuentas bancarias.