OPB / OMICRÓN ENTRE GENTE DE YENSUNNI



ENAJENACIÓN SOCIAL

La noción de alienación ayuda a explicar qué se entiende por enajenación. Se trata del fenómeno o la circunstancia que priva al individuo de su propia personalidad y que anula su libre albedrío. El sujeto enajenado (o alienado) no puede actuar por su cuenta sino que se encuentra dominado por aquello que ordena una persona o una organización.


 La estrategia de Yensunni para deshacerse de las personas que le estorban no va más allá de El Príncipe de Maquiavelo.

Lamentablemente su tránsito por las aulas ha servido para refinar su estilo. 

Usar y deshechar a las personas no tiene mesura, tanto en el círculo más íntimo como en el extremo.

Me decía un iniciado en las artes tácticas...nadie en su sano juicio se cortaría un dedo, cada uno de ellos es útil para algo.

HECHOS

El sábado una llamada telefónica daba instrucciones para convocar a Delegados salientes y entrantes para la entrega-recepción de sus encargos.

El cebo para atraer a los salientes era el pago de su finiquito, está acción fue propuesta para que se presenten todos, incluyendo aquellos inconformes por el proceso electoral.

La orden salió de una llamada del celular de Adrián Sánchez Gutiérrez, secretario de Gobierno, dirigida a Víctor Silvarán, coordinador de alcaldías y delegaciones.

Al presentarse los convocados no encontraron quien les pague el finiquito.

El abogado Adrián Sánchez Gutiérrez cobardemente se dió a la fuga, al parecer cursó un par de semestres la materia "Cómo evadir responsabilidades", es una actitud que lo caracteriza.

La política de "Puertas Abiertas" significa que tiene tres accesos para fugarse.

Tras el conato de escándalo o enfrentamiento con la gente, Víctor Silvarán salió bien librado, gracias a sus buenas relaciones con los delegados.

Sin embargo, la consigna de Yensunni se concretó el día de hoy.

Fue despedido de su cargo Víctor Silvarán, coordinador de alcaldías.

El universitario Adrián Sánchez Gutiérrez deambula por los pasillos con la cabeza gacha y la cola entre las patas, obedeciendo órdenes aunque sean contra su criterio.

Punto y aparte...

Casualmente, la variante Omicrón fue detectada en una persona que labora en la secretaría de Gobierno.



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